lunes, 3 de agosto de 2009


QUIEN CANTA, SUS MALES ESPANTA.
(REFRÁN POPULAR)

¡Por fin! Hoy me encuentro con tiempo suficiente para realizar esta entrada con sosiego.

Aún sigo por Granada. El futuro cubículo, prácticamente, ya está adecentado. Únicamente resta que me adecenten los cuartos de baño (detalles como una mampara, por ejemplo).

No obstante, me reitero en lo apuntado en la anterior entrada: lo de una mudanza no se lo deseo a nadie, ni a mi peor enemigo. Y es que, en cuanto crees que el asunto ya ha cuajado, surge un imprevisto que lo desbarata todo por completo o que genera la posibilidad de provocar un problema. Vayan algunos ejemplos en forma interrogante:

¿Y si en el día anterior al traslado de los muebles te levantan todo el asfalto de la calle en la que vivías?

¿Y si en el momento de descargar los trastos en tu nuevo domicilio se percatan de la presencia en tu edificio de un saliente que no permite que la plataforma elevadora prevista sea útil?

¿Y si, mientras se reorganiza la descarga, la densidad del tráfico impide que ésta tenga lugar a la hora señalada y la cuestión se demore hasta cerca de cinco horas después?

¿Y si, por añadidura, el ascensor, que puede resultar un apoyo en el trabajo, todavía no funciona?

¿Y si, cuando te atreves a pensar que ya cada cosa se halla dispuesta, te quedas sin electricidad durante cuatro larguísimos días por cuestiones entre la promotora del edificio y la empresa que suministra este -hoy desgraciadamente más que necesario- servicio?

Suma y sigue.

Una mudanza te curte.

Por lo demás, la zona en la que viviré (¿o puedo decir que ya vivo?) es una gozada. Limpia, organizada, con todo a un paso. Una muestra: a dos minutos, dispongo de una librería especializada en cómics y en literatura de terror y ciencia-ficción. Ya me he hecho con una novela sobre mis monstruos favoritos, los entrañables vampiros: Nocturna, escrita por Guillermo del Toro, y que forma parte de la Trilogía de la Oscuridad. Es una actualización de la más que conocida historia de Drácula, de Bram Stoker, y aunque las sorpresas son mínimas, no desmerece.

En fin, perráncanas y perráncanos, seguid disfrutando de vuestro tórrido verano.

Pronto os daré más noticias.

2 comentarios:

Carmen dijo...

Y mira que yo he sufrido mudanzas (la última este pasado febrero...), pero reconozco que ésta me supera!!! ¿No será el guión de una peli de terror?

Tepes dijo...

Pues si no lo es, se le acerca bastante, malagueña. Pero bueno, lo peor ya está pasado. Aunque no bajo la guardia, que en cuanto esté desprevenido seguro que surge algo...