sábado, 29 de agosto de 2009


TRISTES QUEJAS DE AMOR DILATO AL VIENTO.
SERÁN, POR TRISTES, DE MI ERROR CASTIGO;
POR QUEJAS, NUEVO HONOR DE MI ENEMIGO;
Y POR DE AMOR, DE AMANTES ESCARMIENTO.
(PEDRO SOTO DE ROJAS)

Continúo con el muestrario de esculturas clásicas. Aquí tenéis a Afrodita rechazando, zapatilla en mano, los requerimientos de Pan. Entre ambos, Cupido parece divertirse con la situación. Este grupo puede contemplarse en el Museo Arqueológico Nacional de Atenas. ¡Pobre Grecia! Las imágenes de los incendios me han conmovido.

En fin, ¿qué voy a deciros que no sepáis? Ya se acerca el fin de la temporada ociosa y hay que reorganizar las coordenadas mentales. Menos mal que en Linares estamos de feria y, como culmen del estío, el encontrarse con oportunidades de entretenimiento ayuda bastante. Por ejemplo, asistir a un concierto de Danza Invisible, un grupito que, allá en mi mocedad, contribuyó con su música a algún que otro momento.

El lunes, de regreso a Manzanares, para rematar lo pendiente. El viernes, otra vez en Linares para preparar lo poco que me resta para instalarme el domingo, definitivamente, en Granada. El martes pasado di una vuelta por mi nuevo emplazamiento y, aunque se notan los efectos de agosto, la ciudad sigue antojándoseme un paraíso ya no perdido sino reencontrado. ¡Qué ganas de dar el pistoletazo de salida!

Nos vemos en nada, perráncanas y perráncanos.

Por cierto, a quienes estáis interesados en el listado de mis películas favoritas: he añadido algunos títulos más. Si os animáis a verlas, ¡disfrutadlas!

lunes, 24 de agosto de 2009


¡CON QUÉ LIGEROS PASOS VAS CORRIENDO!
¡OH, CÓMO TE AUSENTAS, TIEMPO VANO!
¡AY, DE MI BIEN Y DE MI SER TIRANO,
CÓMO TU ALTIVO BRAZO VOY SINTIENDO!
(LUIS CARRILLO Y SOTOMAYOR)

Le ha llegado el turno a Venus. Aquí la tenéis, tan espléndida ella.

Como dije en la anterior entrada, estos últimos días los he dedicado a la lectura y al cine. Así que, como hay poco que contar, el menú de hoy es ¡crítica literaria! Pero, tranquilidad, que no me enrollaré y sólo comentaré los tres últimos libros que he concluido.

Por fin he rematado la segunda lectura de La Ilíada, de Homero. Primer monumento de la literatura occidental, sin duda. Una vez que se superan los rasgos de estilo (es épica, puñetas: paralelismos insaciables, reiteraciones fatigosas, símiles vastísimos, etc.), resulta un innegable y pletórico testimonio literario e histórico. Lo mejor, sin duda, las intervenciones de los dioses olímpicos, unos niños traviesos y cabroncetes que disfrutan jugando con los humanos, aunque sean héroes. Impagable la teomaquia con que estos divinos nos deleitan al final de la obra. Por lo demás, me reitero en la afirmación de que soy más del homicida Héctor que del Pelida Aquiles, el protagonista de la epopeya: un héroe un tanto caprichoso, engreído y ufano. Mejor esta elección que decidir si me posiciono con la Esteban o con la Campanario.

También he leído una biografía sobre una de las figuras del siglo XVI: Calvino, una vida por la Reforma, de Joan Gomis. Sólo recomendable para curiosos. Calvino fue un señor más de pensamiento que de acción, y este hecho influye en la elaboración del mencionado estudio: las partes dedicadas a analizar su concepto de la religión (las más) y a explicar su deseo de reglamentar y organizar los nuevos sentires pesan sobre el conjunto de la obra, y en ocasiones devienen en repetitivas y engorrosas. No obstante, gratifica el saber que nadie es perfecto y que, al fin y al cabo, la Reforma (luterana, anglicana o calvinista, qué más da) concluyó en posturas a veces muy similares a las del por ellos vituperado catolicismo. Y, si no, que le pregunten a Miguel Servet.

Finalmente, recomiendo fervorosamente a los y las amantes del género fantástico y de terror la aportación de Guillermo del Toro y Chuck Hogan: Trilogía de la Oscuridad I: Nocturna. A pesar del grosor y de un arranque un tanto farragoso (tantos tecnicismos aeroportuarios y forenses cansan), se lee con agilidad y divertimento al reconocer todo lo que estos autores deben a los maestros del género. No esperéis nada original, pues esta primera parte es un refrito de Drácula aderezado con líneas argumentales tomadas de las últimas películas de zombies (ya sabéis, lo de una pandemia que acaba por amenazar y destruir una gran urbe, en este caso Nueva York). Y ahí radica su encanto, en que los autores son honestos y no tratan de engañar haciendo creer al lector que están ofreciendo algo novedoso y desconocido sino un homenaje a todos los que han contribuido al devenir del fantástico. A tal fin, recomiendo la revisión de un clásico: La noche de los muertos vivientes. Y si os atrevéis con la novela, no comparéis: disfrutad.

Hasta dentro de poco, perráncanas y perráncanos.

martes, 18 de agosto de 2009


EL SABER SEPARADO DE LA JUSTICIA
MERECE MÁS BIEN EL NOMBRE DE ENGAÑO
QUE EL DE SABIDURÍA.
(PLATÓN)

La ilustración, otra de las esculturas de la exposición del Museo de Alicante: Dionisos junto a una representación antropomórfica del vino.

Días tranquilos. Días apenas destacables. Muchos momentos (puede que demasiados) para pensar, para leer, para escribir... O para rescatar un poema como el que os ofrezco, escrito hace tres años, cuando volvió a asaltarme la vena surrealista.

No le busquéis explicación. Simplemente dejad que las imágenes os zarandeen.


Un poema cualquiera

Duermevela de proa:
Recóndita fámula
De aspavientos de tabaco.
Rabia la púa en el hueco cincelado
Entre dentelladas de besos ultrajados
Por los secuaces del afecto.
Pero quién no ruboriza la cotorra
Que patina sobre tibias aguas
De un océano desalado por haces de perlas.
Pero quién no detesta la pétrea máscara
Del mariscal empecinado en sublimar
Los artificios de la melancolía.
Se multiplican los vacíos,
Se manipulan los silencios,
Se rastrillan las nadas.
Pero quién no mastica la melodía
De una azucena domesticada.
Pero quién no escudriña el ballet
De remotas primaveras.
El tic-tac del reloj
Cercena infinitos escenarios
Mientras les otorga naturaleza
De cómicas pirámides.

Hasta pronto.
Y gracias a quienes habéis participado en la última encuesta. Parece ser que la familia y el calor son los factores más insoportables del verano. Luego, el aburrimiento.
Lo terrible es cuando los tres factores se unen en un cóctel explosivo.

lunes, 10 de agosto de 2009


LO MEJOR ES CONFORMARSE
CON LA APARIENCIA DE LA REALIDAD
Y ESCOGER SUS FACETAS
MÁS PLACENTERAS Y HERMOSAS.
(MANUEL VÁZQUEZ MONTALBÁN)

De aquella visita al Museo Arqueológico de Alicante no sólo me queda en la retina el recuerdo del Discóbolo. También podían admirarse otras esculturas como la de la imagen de hoy, un sátiro haciendo de las suyas con una ninfa.

En fin, que lo más peor de LA MUDANZA ya ha concluido. Las dos semanas previstas se convirtieron en tres, pero ya puedo afirmar que el cubículo se halla dispuesto para empezar de manera digna. Únicamente restan algunos detalles en la decoración... Y reconozco que, a pesar de los pesares (irritaciones en la piel incluidas), he pasado ya ratos muy buenos entre las paredes de mi recién estrenada vivienda. E igualmente por las calles y lugares de Granada, que se sale de lo esplendorosa que está.

Con todo, no bajaré la guardia. A ver si me confío y surge cualquier historieta que vuelva a descolocarme.

Ahora toca lo que la gente me dice con la frase típica por excelencia: "Que lo disfrutes con salud". Y yo respondo: "Por supuesto. ¡Y en la enfermedad si se precisa!".

Lo curioso es que me he dado cuenta de que aún no me he hecho a la idea de que por fin regreso de forma definitiva a Granada. Mi mente todavía se desenvuelve por otras coordenadas. Eso sí, los ratos en que soy consciente de ello son pletóricos. Supongo que en septiembre sucederá la epifanía.

Hasta pronto, perráncanas y perráncanos.

lunes, 3 de agosto de 2009


QUIEN CANTA, SUS MALES ESPANTA.
(REFRÁN POPULAR)

¡Por fin! Hoy me encuentro con tiempo suficiente para realizar esta entrada con sosiego.

Aún sigo por Granada. El futuro cubículo, prácticamente, ya está adecentado. Únicamente resta que me adecenten los cuartos de baño (detalles como una mampara, por ejemplo).

No obstante, me reitero en lo apuntado en la anterior entrada: lo de una mudanza no se lo deseo a nadie, ni a mi peor enemigo. Y es que, en cuanto crees que el asunto ya ha cuajado, surge un imprevisto que lo desbarata todo por completo o que genera la posibilidad de provocar un problema. Vayan algunos ejemplos en forma interrogante:

¿Y si en el día anterior al traslado de los muebles te levantan todo el asfalto de la calle en la que vivías?

¿Y si en el momento de descargar los trastos en tu nuevo domicilio se percatan de la presencia en tu edificio de un saliente que no permite que la plataforma elevadora prevista sea útil?

¿Y si, mientras se reorganiza la descarga, la densidad del tráfico impide que ésta tenga lugar a la hora señalada y la cuestión se demore hasta cerca de cinco horas después?

¿Y si, por añadidura, el ascensor, que puede resultar un apoyo en el trabajo, todavía no funciona?

¿Y si, cuando te atreves a pensar que ya cada cosa se halla dispuesta, te quedas sin electricidad durante cuatro larguísimos días por cuestiones entre la promotora del edificio y la empresa que suministra este -hoy desgraciadamente más que necesario- servicio?

Suma y sigue.

Una mudanza te curte.

Por lo demás, la zona en la que viviré (¿o puedo decir que ya vivo?) es una gozada. Limpia, organizada, con todo a un paso. Una muestra: a dos minutos, dispongo de una librería especializada en cómics y en literatura de terror y ciencia-ficción. Ya me he hecho con una novela sobre mis monstruos favoritos, los entrañables vampiros: Nocturna, escrita por Guillermo del Toro, y que forma parte de la Trilogía de la Oscuridad. Es una actualización de la más que conocida historia de Drácula, de Bram Stoker, y aunque las sorpresas son mínimas, no desmerece.

En fin, perráncanas y perráncanos, seguid disfrutando de vuestro tórrido verano.

Pronto os daré más noticias.